El director madrileño Miguel Periáñez fallece a los 54 años a causa del coronavirus

Miguel Periáñez (página Grupo de Cámara Amadís)

El director de coro Miguel Periáñez ha fallecido en Madrid a los 54 años a causa del coronavirus contraído en el hospital en el que estaba ingresado para ser tratado de un linfoma. Muy apreciado en la profesión y en el mundo sindical, había pertenecido a varias formaciones y dirigido, entre otras, la Coral Plaza Mayor de Madrid, el Grupo de Cámara Amadís, el coro Voces para la Paz y el Coro de la Federación Coral de Madrid fundados o cofundados por él. Dirigió también el coro de la Compañía Ópera Cómica de Madrid, la Camerata Corte de Madrid y colaboró en numerosas ocasiones con el Coro de Voces Graves de Madrid. Casado con la cantante Fátima Urbina, Periañez deja dos hijos, Raquel y Manuel. El pesar generalizado por su fallecimiento se ha plasmado en numerosos mensajes y homenajes en las redes sociales.

---

Miguel Periáñez nació en Madrid en 1966. A los 16 años comenzó a estudiar solfeo y guitarra, y posteriormente también trompeta, entrando a formar parte de la agrupación que acabaría convirtiéndose en la Banda Sinfónica Municipal de Coslada. Poco después ingresaría en Madrid en el Conservatorio donde continuó sus estudios de Guitarra (obteniendo el grado de Profesor), Armonía, Contrapunto, Música de cámara, Piano y Dirección y en la Escuela de Dirección Maestro Navarro Lara en la que se formó en Dirección coral y de orquesta. También realizó estudios de especialización en Técnica Vocal e Interpretación de Música Antigua, de la mano de maestros como Marcos Vega y Adolfo Gutiérrez Viejo.

En 1986 ingresó en la Coral Tak Orquesta, en la que dio sus primeros pasos como director de coro; en 1990-1991 formó parte del Coro de la Sociedad Bach, posteriormente del Grupo Barroco Gaudeamus y en 1991-1992, del Coro de la universidad Politécnica de Madrid. Simultáneamente, en 1990, se puso por primera vez al frente de la Coral Plaza Mayor de Madrid, con la que interpretaba música popular, folklore y fragmentos de zarzuela.

A finales de 1991 fundó el Grupo de Cámara Amadís, especializado en música antigua, aunque también ofrece anualmente, como cierre de la fiesta de 'los mayos' de Lavapiés, un recital con fragmentos seleccionados de Zarzuela. Como director de Amadís participó en la fundación del coro Voces para la Paz, y en la del Coro de la Federación Coral de Madrid. Desde el año 2003 colaboraba con la Compañía Ópera Cómica de Madrid como preparador de coros y desde 2003 fue director del coro de Producciones Guridi. También colaboró en numerosas ocasiones con el Coro de Voces Graves de Madrid.

El Grupo de Cámara Amadís publica en su página de Facebook:

"Queridos amigos.

Nos hemos quedado huérfanos. Con el corazón lleno de dolor tenemos que despedir a Miguel, nuestro director, el alma mater de este grupo, que nació y vivió siempre bajo su dirección, y que fue lo que siempre nos distinguió, con su forma extraordinaria de conectar y transmitir lo que solo los grandes músicos pueden conseguir.

Hemos tenido la fortuna de haber podido tener a Miguel en nuestras vidas. De habernos dejado llevar por su enorme sensibilidad musical y humana. De haber disfrutado y aprendido con sus sesiones y ensayos, sus conocimientos, su paciencia infinita, su motivación y su inmenso amor por la música.

Mantengamos su memoria en nuestro recuerdo y en nuestro corazón.

GRACIAS por tanto, Maestro. Hasta siempre, Amigo".

El Coro de Voces Graves de Madrid le dedica este homenaje en las redes sociales:

"En estos durísimos días, en los que no podemos abrazarnos en momentos de duelo, las redes sociales cobran auténtico sentido. Hoy nos ha dejado Miguel Periáñez, gran amigo que compartió junto a nosotros numerosas aventuras musicales como lo fueron las Corales TAK, Amadís y Plaza Mayor. Fue nuestro preparador y director en montajes escénicos de zarzuelas entre 2001 y 2004. Hoy le rendimos tributo con una pieza que nos dirigió. Fue un HONOR contar con sus manos.
Querido Miguel, tu música y, sobre todo, tu recuerdo, siempre estará con nosotros".

Y el Sindicato CCOO, del que formaba parte, publica esta necrológica:

In Memoriam, Miguel Periáñez
Me gustaría haber podido encontrar las palabras precisas para honrar a Miguel, pero no me sale nada más que la rabia y el dolor que me produce su pérdida.

Podría rememorar su bonhomía, su inteligencia -la racional y también la emocional-, su feminismo vital, la enorme valentía con la que se enfrentaba a todo y la confianza que transmitía... Era un grandísimo sindicalista, y músico, y director de orquesta, y dirigía un coro, y un padre orgulloso y dedicado, y ... tantas vidas en una, rica, plena, compartida...

Pero al escribirlo lo que más coraje me da, es que no lo pueda leer, no lo pueda escuchar y... ocurre tantas veces, que no nos decimos lo mucho que nos apreciamos, lo mucho que nos queremos... mientras tratamos, todos los días, de ”arreglar el mundo”, sabiendo que el mundo... el Mundo no tiene Arreglo, aunque sí “arreglos”, de esos de los que hablaba Eduardo Galeano que lo cambian todo.

En el hombre que amaba a los perros, Padura escribía que de las pocas cosas que repartidas siempre se toca a más estaban la miseria y el dolor... y añadiría, el trabajo sindical.

Hoy nos toca demasiado dolor a compartir y nos espera mucha tarea. Este mundo es peor sin Miguel. Nos va a tocar esforzarnos más aún para que no se note tanto.

Siempre en nuestra memoria amigo, compañero... tan temprano

José María Martínez