El obispado de Santander censura los 'Carmina Burana' de La Fura

El obispado de Santander ha censurado los 'Carmina Burana' con que la compañía catalana La Fura dels Baus iba a cerrar el Año Lebaniego el sábado 14 de abril en el aparcamiento del monasterio de Santo Toribio de Liébana. Ante la negativa de la diócesis santanderina a que la obra se presentase delante del monasterio, la Sociedad Año Jubilar Lebaniego, el Gobierno de Cantabria y la sociedad adjudicataria de las actividades del cierre del evento han acordado con La Fura trasladar la puesta en escena al recinto de La Serna de Potes los días 11 y 12 de mayo, una vez concluido el evento religioso.

---

Para poder representar la obra en este nuevo espacio en la villa de Potes se instalará un carpa de alrededor de 3.000 metros cuadrados y 15 metros de altura. El hecho de que el aparcamiento del Monasterio de Santo Toribio de Liébana tenga aforo para casi 4.000 personas y el recinto de La Serna sólo para unas 2.200, ha obligado a programar dos sesiones en vez de una. El hecho ha sido dado a conocer este jueves 22 de marzo en una rueda de prensa por los consejeros de Turismo y Cultura del Gobierno de Cantabria, Francisco Martín y Francisco Fernández Mañanes, que han expresado su respeto a la decisión de la Iglesia.

El obispo de Santander, Manuel Sánchez Monge, ha explicado en declaraciones a la COPE que la Diócesis de Santander no ha autorizado la representación del espectáculo porque su "contenido moral es contrario a los principios de la Iglesia", "escandaliza a los creyentes y es una falta de respeto para la libertad de creencias".

'Carmina Burana' es una cantata escénica compuesta por Carl Orff entre 1935 y 1936, utilizando como texto algunos de los poemas medievales de 'Carmina Burana' conservados en la Biblioteca Estatal de Baviera, en Múnich. Se estrenó el 8 de junio de 1937 en la Alte Oper de Fráncfort del Meno con el subtítulo 'Cantiones profanæ cantoribus et choris cantandæ comitantibus instrumentis ataque imaginibus magicis' ('Canciones laicas para cantantes y coreutas para ser cantadas junto a instrumentos e imágenes mágicas').

El códice recoge un total de 300 poemas "en los que se ensalza el placer por vivir y los placeres terrenales, siempre con una mirada crítica y satírica hacia los estamentos sociales y eclesiásticos de la época". Orff escogió veinticinco canciones y las ordenó de modo que pudieran ser representadas en un escenario.En la cantata, además de la orquesta (destaca la abundante percusión) y los coros, intervienen solistas (soprano, tenor y barítono).