La Staatsoper de Berlín reabre sus puertas definitivamente tras una breve inauguración en septiembre

Staatsoper Berlin (Facebook Staatsoper Unter den Linden: Franziska Krug/Isa Foltin)

La Ópera Estatal de Berlín celebra este jueves 7 de diciembre su 275º aniversario con su reapertura después de siete años de trabajos de rehabilitación que han costado 400 millones de euros y en los que la institución ha permanecido 'exiliada' en el Teatro Schiller de la capital alemana. El teatro que se abrió con nueve días de fastos a finales de septiembre, volvió a cerrarse entonces para completar los últimos detalles técnicos y se reabrirá esta vez de manera definitiva con un concierto de cumpleaños de la orquesta dirigido por Daniel Barenboim con obras de Felix Mendelssohn-Bartholdy, Pierre Boulez y Richard Strauss, al que seguirá el viernes 8 el estreno de la ópera 'Hansel y Gretel', de Engelbert Humperdinck y el sábado 9 el de 'L'incoronazione di Poppea', de Claudio Monteverdi.

La 'Staatsoper Unter den Linden' ('Ópera del Estado Bajo los tilos') es uno de los teatros de ópera más importantes de Alemania. Está localizado en el boulevard Unter den Linden que le da su nombre actual, aunque a lo largo de su historia ha tenido otros. Es conocida como 'Ópera del Estado de Berlín' (Lindenoper). Su renovación ha sufrido numerosos contratiempos que han motivado que su reapertura se retrasase cuatro años y sus costes se disparasen de los 239 millones de euros previstos inicialmente a los 400 millones.

El edificio fue construido como una Royal Court Opera de 1741 a 1743, a instancias del rey Federico II de Prusia (1712-1786). Diseñado por Georg Wenzeslaus von Knobelsdorff, fue el primer teatro de ópera en funcionamiento libre en Alemania y en ese momento el más grande de Europa. Se inauguró, antes de finalizar su construcción, el 7 de diciembre de 1742 con una representación de la ópera 'Cleopatra e Cesare' de Carl Heinrich Graun. El 18 de agosto de 1843, el teatro fue destruido por el fuego. Se construyó un nuevo edificio según planos del arquitecto Carl Ferdinand Langhans que fue inaugurado el siguiente invierno con una representación de la obra de Meyerbeer, 'Ein Feldlager in Schlesien' ('Un campamento en Silesia'). Durante la Segunda Guerra Mundial fue destruido de nuevo por las bombas y tras una larga reconstrucción, volvió a abrir sus puertas en 1955 con 'Die Meistersinger von Nürnberg'. En 1992 el director argentino-israelí Daniel Barenboim fue designado Director Musical.

Durante la reforma, los techos se han alzado cinco metros y se ha creado una nueva galería que amplifica la resonancia y permite que el tiempo de reverberación de la música se duplique 1,6 segundos. Además se ha construido una conexión subterránea entre el escenario y la sala de ensayos, un túnel de 75 metros de largo y 18 metros de altura que permite ganar tiempo a los músicos. Externamente, el edificio recupera el color rosado que lucía después de su reconstrucción tras la Segunda Guerra Mundial realizada por el arquitecto Richard Paulick.