El INAEM renueva por tres años el contrato del director de la Zarzuela, Daniel Bianco

Daniel Bianco (cortesía del director)

La directora general del INAEM, Amaya de Miguel, con el acuerdo del Consejo Artístico de la Música, ha decidido la renovación del director artístico del Teatro de la Zarzuela, Daniel Bianco, que firmará por tres años más al frente del coliseo madrileño, el tiempo máximo fijado en el Código de Buenas Prácticas. Bianco continuará en el puesto hasta el 1 de noviembre de 2023 culminando un proyecto que el escenógrafo argentino centra en "la preservación del patrimonio lírico, actualización del género y la apertura del teatro a nuevos públicos". Su mandato vivió en 2018 la crisis del intento de absorción del teatro de la Calle Jovellanos por parte del Teatro Real, peligro que llevó a la huelga del personal del coliseo y que fue conjurado por el cambio de Gobierno y la decisión en contra del entonces recién nombrado ministro de Cultura José Guirao.

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El propio Teatro de la Zarzuela ha publicado en sus redes sociales la relación de los logros del mandato de Bianco: "la actualización de los grandes títulos del repertorio con un total de 31 nuevas producciones; la recuperación del patrimonio lírico español -rescatando 14 títulos que permanecían en el olvido- con la apuesta por la nueva creación, destacando entre estas producciones ‘La casa de Bernarda Alba’ –Premio Ópera XXI a la Mejor Nueva Producción de Ópera de la Temporada 2018/2019–, ‘Tres sombreros de copa’ o ‘Los aspirantes’ –ganadora del primer Concurso de Proyecto de Obra Lírica convocado por el Teatro de la Zarzuela– y el estreno de 'Cecilia Valdés', la primera zarzuela no española que se sube al escenario en los 163 años de existencia del coliseo.

Otro dato positivo ha sido la emisión en directo vía streaming a través de Facebook, YouTube y su página web de una decena de las producciones del teatro. Por otra parte, y como publica el Teatro en Face: "Desde su llegada a la dirección, Bianco ha aumentado el número de funciones en un 42%, la ocupación media se ha incrementado hasta superar el 93%,se ha doblado el número de abonados y se ha producido una renovación del público hasta reducir la media de edad en más de 9 años".

En el capítulo de las sombras de su dirección, ha sido muy criticada la práctica reiterada de recortar los libretos de las obras presentadas. Las protestas se produjeron especialmente en algunos de los títulos de repertorio, y llegaron al límite en las representaciones de 'Doña Francisquita' dirigida escénicamente por Lluis Pasqual, que eliminaba la mayor parte del texto hablado de la zarzuela sustituyéndolo por una narración a cargo del actor Gonzalo de Castro, víctima inocente en la mayor parte de las funciones, de los abucheos dirigidos al regista. 'Doña Francisquita' cosechó un gran número de descalificaciones y protestas por parte del público que llegó a interrumpir algunas funciones con gritos y abucheos.

Las mutilaciones de texto, de las que no se libró ni siquiera 'Katiuska' dirigida escénicamente por Emilio Sagi, ya habían sido anunciadas por Bianco en el momento de su designación, cuando entre sus propósitos para el cargo, y dentro de su objetivo de "poner al día el repertorio lírico español para abrirlo a nuevos públicos",  planteó: "partiendo de un escrupuloso respeto a la música, la revisión de los textos para hacerlos comprensibles a las generaciones actuales", El proyecto 'Zarza' planteado para acercar a los jóvenes al género lírico ha obtenido también numerosas críticas negativas por el bajo nivel vocal de muchos de sus participantes.

Bianco, nacido en Buenos Aires, estudió en la Escuela Superior de Bellas Artes de la Nación, Ernesto de la Cárcova, especializándose en escenografía de teatro y cine. Afincado en España desde la década de los ochenta, su primer trabajo en nuestro país fue como ayudante de escenografía en la ópera 'Armide' de Gluck, precisamente en el Teatro de la Zarzuela. Desde 1986 compaginó su labor de escenógrafo con las tareas de dirección técnica y producción en el Teatro Real (Madrid), en el Teatro María Guerrero y en la Compañía Nacional de Teatro Clásico. Desde 2008 hasta 2015 fue director artístico adjunto a Emilio Sagi del Teatro Arriaga de Bilbao y desde noviembre de ese año dirige el Teatro de la Zarzuela, puesto para el que fue elegido entre 26 candidatos presentados para sustituir a Paolo Pinamonti que dejó el puesto para hacerse cargo de la dirección del Teatro San Carlos de Nápoles.

En la rueda de prensa en la que se hizo público su nombramiento hace cinco años, Bianco declaró que llegaba al cargo "a programar para todos..., que quería seducir a todas las franjas de público, apostar por artistas emergentes, cuidar el repertorio y tender puentes con Latinoamérica". Anunció entonces un concurso de jóvenes talentos y otro para una obra de encargo y declaró además que no dirigiría ninguna zarzuela pero que le gustaría firmar alguna escenografía.