El actor y cantante Miguel de Grandy fallece repentinamente en Madrid a los 81 años

Foto: Miguel de Grandy como don Hilarión (Facebook)

El actor y cantante cubano afincado en España Miguel de Grandy ha fallecido repentinamente en Madrid a los 81 años. Casado en dos ocasiones, deja tres hijos: Julie, actriz y Miguel, abogado en EEUU, de su matrimonio con la actriz y cantante cubana Bertha Sandoval, y Adolfo, actor, cantante y director, de su enlace con la actriz Concha del Val. El funeral tendrá lugar en Madrid en lugar y horario todavía por determinar, y sus cenizas serán esparcidas en la Rosaleda del parque del Oeste, según ha informado su hija Julie.


Grandy, que nació en La Habana el 5 de julio de 1934, era hijo del tenor y director cubano Miguel de Grandy, quien estrenó zarzuelas de Lecuona, Roig y Prats que compusieron papeles expresamente para él, y de la actriz madrileña Julita Muñoz que inició su carrera en el teatro con sólo dos años. Debutó en el Teatro Municipal de Caracas a los siete años, para actuar más tarde como tenor cómico en la compañía de Marcos Redondo en la que con 17 años interpretó el papel de Aníbal de Luisa Fernanda. Recibió formación en baile español, ballet clásico y danza moderna.

Alternó continuamente el género lírico con el teatro de texto y aunque la zarzuela fue el género en el que más incursiones realizó, consiguió alguno de sus mayores éxitos con la opereta Carlo Monte  en Montecarlo (1996) en el Teatro Español de Madrid, y con la versión española del musical de Walt Disney La bella y la bestia (1999).

En 1960 salió de Cuba hacia México con el show del Casino Parisién. Durante su temporada mexicana hizo radio y televisión y fue galán cómico en la compañía de Óscar Ortiz de Pinedo. De México viajó a Panamá y la República Dominicana con la compañía del cómico cubano Leopoldo Fernández. En 1964 llegó a Miami donde fue pionero de las salas de teatro. Dos años después, se desplazó a Nueva York convirtiéndose en el primero en dirigir una zarzuela en Carnegie Hall. Regresó a Miami en 1968 donde fundó con otros entusiastas del género la empresa Grateli (Gran Teatro Lírico) con la que produjo y protagonizó diversas comedias musicales y zarzuelas.

Foto: Grandy (Facebook)

En 1971 se trasladó a España donde ha triunfado durante casi cuatro décadas en teatro, cine y televisión, con compañías privadas y públicas como la del Teatro de La Zarzuela o la Compañía Nacional de Teatro Clásico. En 1991 celebró sus bodas de oro con el teatro, con la comedia Cena para dos, de Santiago Moncada, en el Teatro Bellas Artes de la ciudad de Miami, por la que obtuvo el trofeo Otto Sirgo como mejor actor del año. Recibió además las llaves de la ciudad por su contribución a la difusión del teatro.

En los últimos años ha figurado en el reparto de varias películas, algunas de ellas rodadas en Estados Unidos. En 2007 grabó el CD de poesías 'Miguel De Grandy – Voz en verso'. En 2008 publicó, dentro de la colección Memorias de la escena española, su autobiografía bajo el título de ¡Que me quiten lo bailao! Afirmaba que sólo se jubilaría del escenario con los pies por delante y aunque ya anunciaba que no tendría epitafio puesto que quería ser incinerado, manifestaba su deseo de que la frase que identificase su lugar de reposo fuera: “Aquí yace una buena persona”.

Foto: Miguel de Grandy (Facebook)